Los dirigentes de los sindicatos de los municipios de Bacalar y Felipe Carrillo Puerto se dijeron estar listos para ser escuchados por parte del gobierno del estado para que se evite la entrada de UBER y que se afecten a más de 100 mil familias que dependen del trabajo del volante. De lo contrario se manifestarán de forma indefinida.
En primera instancia el dirigente de los taxistas en el municipio de Bacalar Jair David Ramírez Dzib comentó que son más de 100 mil familias las que no tendrán la oportunidad de generar un patrimonio ante la llegada de UBER, tras la aprobación de la ley de Movilidad.
Mencionó que están preocupados y están con la disposición para realizar diálogos con las autoridades del gobierno del estado para que se tomen en cuenta las voces de quienes han estado detrás de un volante por los últimos 50 años.
Dijo estar molesto con la aprobación “al vapor” de los legisladores, pero consideró que se debieron tomar en cuenta los procesos que se habían iniciado de mesas de diálogo con los diferentes sindicatos para que se llegará a consensos en esta Ley de Movilidad que consideró solo beneficiará a las empresas que cuentan con estas plataformas digitales de transporte.
Por su parte Mario Didier Aguilar Ramírez dirigente de los taxistas de Felipe Carrillo Puerto “Francisco May”, apuntó que le están quitando “su forma de vida y trabajo”, por tanto es que se manifestarán de manera permanente en caso de ser necesario contra estas reformas en materia de transporte.
Apuntó que se han estado realizando renovaciones y capacitación por parte de los trabajadores del volante en todo el estado, pero de manera sorpresiva se realizó la aprobación de esta nueva ley que los ha dejado en desventaja con la empresa UBER.
Agregó que son respetuosos de la figura del gobierno del estado pero consideran que se debe atender el llamado de 100 mil familias que se verán afectados por esta nueva determinación de la ley de Movilidad que le ha permitido la entrada de UBER a Quintana Roo.
Samuel Caamal